Psicoanálisis: qué es y por qué levanta tanta controversia hoy en día

Estudiar la importancia del inconsciente en la conducta humana supuso un antes y un después en la psicología.

Se trata de una técnica de investigación emocional que Sigmund Freud, el padre de esta teoría y práctica terapéutica, aplicó a personas con problemas tales como fobias para tratar de averiguar qué existía en su inconsciente que pudiera haber ocasionado ese miedo irracional que sentía ante ese objeto o situación. Pero donde tuvo mayor ámbito de aplicación fue en el estudio y posterior tratamiento de personas que padecían neurosis.

El psicoanálisis se basa, por tanto, en el estudio del inconsciente de los pacientes para conocer la causa del trastorno y modificar posteriormente las emociones para corregir ese comportamiento. Este estudio del inconsciente se apoya en tres pilares: la observación directa de los actos que realiza el paciente, sus recuerdos, que pueden haber marcado esos actos, y la interpretación que de todo ello se hace.

La teoría psicoanalítica se centra en dos ideas que constituyen, según este pensamiento, el marco que explica el comportamiento humano: la represión y el conflicto psíquico. La represión se produce cuando un impulso interno, llamado pulsión, fundamentalmente de índole sexual, es reprimido debido a su consideración como amoral o violento y recluido en el inconsciente de la persona. Por su parte, el conflicto psíquico se produce cuando la conciencia interviene para valorar ese impulso y rechazarlo al inconsciente para corregir esas desviaciones que no se consideran normales, es decir, cuando lucha por reprimirlo. De este modo, según Freud, en individuos sanos, estos impulsos no afectan al comportamiento de la persona.

A día de hoy el psicoanálisis ha evolucionado gracias a la aportación e interpretación de la teoría freudiana. Autores como Otto Rank, Jacques Lacan, Erik Erikson, Ernest Jones, Donald Winnicott, Anna Freud, Melanie Klein, Wilhelm Reich o el famoso Carl Gustav Jung han contribuido a la evolución del psicoanálisis, aunque este último lo abandonó por diferencias con lo que planteaba Freud, ya que consideraba que él era un preso de sus propias neurosis y no veía nada más allá de su propio yo, aun cuando estas teorías no resultaran ciertas.

¿Por qué levanta tanta controversia hoy en día?

A día de hoy, los comentarios que lanzara el que fuera su discípulo, Jung, se han demostrado ciertos, por lo que el psicoanálisis se considera el resultado del propio autoanálisis del Freud. De hecho, su aplicación para el tratamiento de la neurosis no se considera efectiva, ya que los pacientes no muestran signos de mejoría en su enfermedad. Ello ha hecho que muchos psicólogos posteriores dudaran de la veracidad de los datos e informes aportados por el propio Freud.

Tampoco se ha demostrado eficaz para comprender la sexualidad de la mujer ni sus deseos, pues Freud consideraba que esta era un ser pasivo que tendía a reprimir sus instintos y deseos sexuales frente al hombre.

Por último, a pesar de que aun hoy cuenta con muchos defensores, la mayoría de los expertos en psiquiatría y psicología no consideran al psicoanálisis como una ciencia propiamente dicha, sino un conjunto de hipótesis que no pueden usarse como terapia dada su escasa utilidad para proporcionar herramientas que mejoren los casos de neurosis o de fobias y que tampoco puede aplicarse a otros ámbitos de la salud mental.